21

Octubre

2014

Hacienda negocia otro sistema de IVA de caja con los proveedores

La escasa acogida que ha tenido

el IVA de caja ha llevado a Hacienda

a negociar otro sistema que impida

que afronten el pago de impuestos

por facturas que no han

cobrado. Una de las opciones que

baraja es la inversión del sujeto

pasivo, que se aplica desde hace

dos años en la construcción, que

fija que sea el deudor el que abone

el impuesto, si no ha pagado la

factura en el plazo legal.

CARLOS MOLINA Madrid

El régimen de IVA de caja, que entró

en vigor este año, iba a ser el instrumento

que dotaría de liquidez

a los proveedores que se

veían doblemente castigados

por el fenómeno

de la morosidad empresarial.

Desde el inicio de

la crisis, los impagos a

pymes y autónomos se

han disparado y los plazos

de pago se estiraron

más allá del periodo establecido

por ley (60

días a partir del 1 de

enero de 2013). Al

mismo tiempo, las

pymes y autónomos estaban

obligados a pagar

religiosamente el IVA

de las facturas emitidas,

aunque no hubieran

sido cobradas.

El sistema ideado por

Hacienda permitiría a

las empresas abonar el

impuesto al cobrar la

factura y no cuando se

emitía. Sin embargo,

tan solo 22.090 pymes y

autónomos (apenas el 0,9% de los 2,3

millones de potenciales beneficiarios)

se acogieron al nuevo sistema.

Una de las razones del fracaso ha sido

la prohibición a que las grandes empresas

pudieran establecer sus reglas a

las pequeñas. Estas últimas se beneficiaban

de la exención de abonar el IVA

si no habían cobrado la factura, mientras

que las primeras se veían perjudicadas,

ya que no podían deducirse los

gastos fiscales derivados de las facturas

hasta que las abonaran. Fuera del

sistema de IVA de caja, el funcionamiento

tradicional era que las grandes

empresas difirieran el pago a los proveedores,

lo que no era obstáculo para

que se dedujeran esos gastos. Con el

nuevo esquema, las grandes no podían

hacer ingeniería financiera y ello llevó

a algunas a amenazar a sus proveedores

con romper los contratos si se acogían

al sistema de caja.

El ministro de Hacienda,

CristóbalMontoro,

reconoció que el

modelo no había funcionado

y que se estudiarían

fórmulas de

mejora. Por eso, ya ha

iniciado los contactos

con los miembros de la

Comisión para la

Lucha contra la Morosidad

Privada para

diseñar un nuevo sistema.

Y una de las opciones

que tiene encima de la

mesa es la de la inversión

del sujeto pasivo.

¿En qué consiste? El

proveedor emite una

factura y debe esperar

60 días, el tiempo legal

establecido por ley,

para el cobro de la

misma. Sobrepasado

ese plazo, el proveedor

podrá ir a Hacienda,

denunciar el impago y solicitar la inversión

del sujeto pasivo. Es decir, que

la Administración Tributaria será la

Los impuestos de las facturas

impagadas los abonarían los deudores

 

OTRAS ACTUACIONES

El periodo de negociación

abierto por Hacienda también

servirá para que las empresas

pongan encima de la

mesa la necesidad de aprobar

un régimen sancionador

para las empresas que incumplan

los plazos de pago.

La Plataforma Multisectorial

contra la Morosidad presenta

el miércoles su informe

anual con los plazos de pago

de las empresas del Ibex 35,

que tradicionalmente son las

que peor salen retratadas en

estas estadísticas. En el año

2013, esas grandes compañías

pagaron a una media de

171 días, el triple de lo permitido.

Contra todas las empresas

morosas, pero especialmente

contra las más grandes, es

para lo que se quiere articular

un régimen sancionador.

De hecho, la Plataforma, que

aglutina a 1,5 millones de

empresas, alcanzó en mayo

un compromiso con el Ministerio

de Hacienda para

debatir e implementar en

breve la propuesta de ley de

creación de un régimen sancionador

para las empresas

morosas. El borrador elaborado

por los proveedores,

que en las próximas semanas

se discutirá con Hacienda,

establece sanciones de hasta

900.000 euros para las infracciones

muy graves y

hasta el cierre por un año en

caso de acumular tres infracciones

muy graves.

Este documento también

fija una serie de bonificaciones

en las sanciones, siempre

y cuando se corrijan los impagos.

Así, una vez que entre en

vigor el régimen sancionador,

los que salden sus deudas en

los siguientes seis meses se librarían

de la sanción y los

que lo hicieran entre el sexto

y el duodécimo mes lograrían

una bonificación del 80%.

Este umbral bajaría al 50% si

se salda en el segundo año de

entrada en vigor de la ley y

del 20% en el tercer año.

Sanciones para las empresas morosas

El presidente de la

Plataforma Multisectorial

contra la

Morosidad, Antoni

Cañete, y el ministro

de Hacienda y

Administraciones

Públicas, Cristóbal

Montoro.

22.090

pymes y autónomos se

han acogido al IVA de

caja, apenas el 0,9% de

los 2,3 millones de

potenciales beneficiarios.

60

días es el plazo máximo

que tienen las empresas

por ley para el pago de

sus deudas privadas.

21%

es el tipo de IVA aplicado.

que reclamará directamente el pago de

dicho IVA al deudor. “Con esta inicia-

tiva se podrían detectar empresas mo-

rosas porque permitiría a la Agencia

Tributaria conocer a aquellos contri-

buyentes que se han desgravado un

IVA que no han pagado y permitiría a

las empresas seguir disponiendo de

tesorería”, señala Antoni Cañete,

presidente de la PlataformaMultisec-

torial contra laMorosidad y miembro

de la citada Comisión. De hecho, apun-

ta que este modelo ya se está aplican-

do en el sector de la construcción desde

2012.

Modificaciones a partir de enero

Fuentes de Hacienda consultadas sub-

rayan que cualquier aportación de los

colectivos afectados será revisada,

siempre y cuando no vaya en contra de

la lucha contra el fraude. Ese proceso

de análisis ya ha comenzado y tiene dos

hitos: la presentación de enmiendas a

la reforma fiscal y a los Presupuestos

Generales del Estado. Esas mismas

fuentes recuerdan que en diciembre se

abrirá otra oportunidad para liquidar

el IVA de caja y podría ser una buena

ocasión para introducir cambios en el

sistema.

Ninguna de las enmiendas aproba-

das en el Congreso de los Diputados a

la reforma fiscal guardaba relación con

el IVA de caja. Actualmente, el texto

normativo que modifica el IRPF, el im-

puesto sobre sociedades y el IVA se en-

cuentra en el Senado. Cabe esperar que

el Grupo Popular incluya novedades y

acepte propuestas de partidos como

Convergència i Unió (CiU) y el Parti-

do Nacionalista Vasco (PNV), que se

abstuvieron en la votación del Con-

greso tras lograr que el Ejecutivo acep-

tara algunas de sus propuestas tribu-

tarias.